Premio Alfaguara 2022.
Cristian Alarcón.
Esta novela es un relato luminoso sobre la vida cotidiana de un individuo pero también sobre las tragedias colectivas que nos acechan. Lo pequeño, lo sencillo, ese paraíso personal que construimos como refugio esta también, en última instancia, lo que siempre nos salva.
Tasio Ortiz de Zárate, el brillante arqueólogo condenado por los asesinatos que aterrorizaron Vitoria hace dos décadas, está a punto de salir de prisión cuando los crímenes se reanudan. En la Catedral Vieja, una pareja de veinte años aparece muerta por picaduras de abeja en la garganta. Pero solo serán los primeros. Unai López de Ayala, un joven experto en perfiles criminales, está obsesionado con prevenir los asesinatos pero una tragedia personal no le permite encararlos como uno más. Sus métodos enervan a Alba, la subcomisaria, con la que mantiene una ambigua relación marcada por los crímenes..., pero el tiempo corre en su contra y la amenaza acecha en cualquier esquina. ¿Quién será el siguiente?
Esto no es una autobiografía, aunque contiene la mejor y la peor parte de la vida del autor. Es un libro escrito para guardar la memoria de la persona amada, Sara Torres Marrero, conocida como Pelo Cohete, con la que Fernando Savater compartió 35 años, toda una vida, de felicidad. Pero no estamos ante un elogio fúnebre porque el deseo de alargar la memoria, de engañar al olvido, acaba por devenir en un acto de agradecimiento, de amor. Es posible que se trate del relato de una batalla que todos sabemos perdida de antemano, pero también, quizá antes que nada, es un canto emocionado a la vida, una llamada a amar y disfrutar en todo momento con la persona que amas. Porque en el texto está la pérdida, la ausencia, el derecho o no al olvido, la muerte, el dolor, la enfermedad, pero también la lucha, el compromiso, el sexo, las risas, las bromas, las complicidades. Todo eso es la vida, y Fernando Savater consigue hacernos reflexionar sobre ello, a través de él, a través de Sara, a través de los dos, como uno solo.